REACCIÓN LEUCEMOIDE

Consiste en el aumento de los leucocitos por encima de 50.000 mm3 o la presencia de un cierto porcentaje de blastos en la sangre que puede confundirse con una leucemia.

Hay pacientes con hallazgos hematologicos que semejan algun tipo de leucemia, pero en quienes la leucemia no se confirma por el curso de la enfermedad o en autopsia, refiriendose esto como una reaccion leucemoide.

Existen tres tipos de reacción leucemoide: mieloide, linfoide y monocitoide.

Las reacciones leucemoides mieloides neutrofílicas son las más frecuentes; consisten en un aumento de neutrófilos y bandas. Se presenta a cualquier edad, de preferencia en jovenes y adultos jovenes, no hay esplenomegalia, rara es la trombocitosis, no hay cromosoma Filadelfia y la fosfatasa alcalina de los neutrofilos esta aumentada. En algunos pacientes solamente la magnitud de la leucocitosis o la presencia de formas jovenes sugieren leucemia.

Ocurre como una respuesta a muchas enfermedades con liberación masiva de leucocitos inmaduros a la sangre periférica. Se observa un incremento exagerado de neutrófilos tanto maduros como en banda e inclusive inmaduros (blastos) con una desviación franca a la izquierda, existen granulaciones tóxicas y vacuolas en los granulocitos. Sin embargo las manifestaciones clínicas de la reacción leucemoide y el laboratorio son elocuentes. Puede semejar una leucemia mieloide, infecciones bacterianas severas (neumonía, septicemias, endocarditis bacteriana, meningitis y difteria), hemorragias o  después de hemólisis severa, eclampsia (algunos casos), reacción a químicos (intoxicación por mercurio, gas mostaza, benzeno), ingesta de sulfas,  en recuperación de agranulocitosis o depresión medular, en recuperación de anemia perniciosa o deficiencia de acido folico en embarazo post tratamiento, cetoacidosis diabética, quemaduras graves, neoplasias (riñón, mama y estómago) o neoplasias que infiltren la médula ósea, post-esplenectomía, ocasionalmente en artritis reumatoide juvenil o poliarteritis nodosa, Talasemia mayor y en tuberculosis aguda diseminada.

Las reacciones leucemoides linfoides, presentan una linfocitosis absoluta donde se pueden apreciar linfocitos atípicos o “virocitos” y células inmaduras; se observa en las infecciones virales (sarampión, varicela, parotiditis, linfocitosis viral aguda, mononucleosis y hepatitis) y posterior a la administración de vacunas (TPD).  En neoplasias como lel carcinoma de estomago (raro), los linfomas y en infecciones bacterianas como en la tuberculosis aguda diseminada y en la dermatitis herpetiforme

Las reacciones leucemoides monocíticas son raras y se observa en las parasitosis y TB.

Para diferenciar una reacción leucemoide de una leucemia aguda y crónica, recordar que la leucemia mieloide aguda cursa con un porcentaje alto de blastos en el frotis de sangre periférica, el examen de la médula ósea muestra un exceso de blastos clónales que desplazan al resto de la serie hematopoyética; elementos que dan el espectro hematológico de las leucemias, o sea, anemia, leucocitosis y/o leucopenia y trombocitopenia.

La leucemia mieloide crónica cursa con esplenomegalia, el nivel de fosfatasa alcalina leucocitaria es baja y el frotis de sangre periférica presenta todos los períodos de diferenciación de la serie mieloide, desde el blasto hasta el segmentado maduro, con un número elevado de eosinófilos y basófilos. Las técnicas citogenéticas o de hibridación fluorescente in situ, revelan la presencia del cromosoma Filadelfia en mas del 90% de los casos.

Ante cualquier duda, debe de transferirse el paciente con el hematólogo, ya que un retraso en el diagnóstico puede ser crucial para su pronostico.